REVIEW de Subway Midnight, demasiado único incluso entre los indies

¿Alguna vez te has quedado solo en el metro? Este juego va de eso. Bueno, va de eso, pero a la vez no. Todo comienza en un largo y tétrico vagón de tren, igual que las mejores historias de asesinatos. Y es de eso de lo que trata Subway Midnight.

Subway Midnight es un videojuego desarrollado por Bubby Darkstar, un desarrollador muy particular que sale a la palestra con esta historia. Aunque Subway Midnight se lanzó hace más de un año en ordenador, nosotros hemos podido probar la versión lanzada recientemente en Nintendo Switch. Una aventura de terror fantasmagórico que en ocasiones nos traslada al mundo del manga más siniestro.

La historia comienza en un tenebroso, tétrico y terrorífico tren a medianoche. Una joven espera sentada en el vagón a llegar a su destino cuando una siniestra figura la observa fijamente. Tendremos que movernos hacia el final del vagón, sin prisa, pero sin pausa para que no nos atrape. Y así nace la que será la gran mecánica que define Subway Midnight: andar hacia el final del vagón.

Subway MidnightSubway Midnight

Siguiente vagón

Durante las aproximadamente dos horas de duración de Subway Midnight el ochenta por ciento del tiempo lo pasaremos andando hacia el final del vagón. A lo largo de nuestro periplo, viviremos una pesadilla de terror en la que, solo si prestamos la suficiente atención, podremos ver un ligero hilo conductor. Durante un vagón tras otros veremos cómo algunos pasajeros murieron en este tren maldito. Las siluetas de tiza sobre el suelo marcarán el comienzo de las seis historias que nos aguardan y que tendremos que desentrañar.

Publicidad:

Cada uno de los personajes asesinados nos mostrarán su pequeño mundo, aquello que marcó sus vidas y su arrepentimiento. Nosotros deberemos pasar de un vagón a otro, como meros espectadores, resolviendo acertijos y puzles que desbloqueen la siguiente estancia. A medida que avancemos en la aventura, los rompecabezas se irán haciendo más complejos y agobiantes hasta el momento final.

Y es aquí donde nace la segunda gran mecánica: pulsar “A” para recoger cosas del suelo. De forma obligatoria para pasar la estancia en algunos casos, mientras que en otros sencillamente están ahí, sí somos lo suficientemente avispados. Ese leve hilo conductor que une la historia de Subway Midnight, está encerrado en ciertos objetos tirados por el suelo que solo tendrán sentido al final del juego.

Publicidad:

Un túnel claustrofóbico

El juego de Buddy Darsktar, explora posibilidades de expresión que rara vez se encuentran en videojuegos, más aún en uno comercial. La premisa de la historia es vivir las calamidades sufridas en este tren infernal y eso se nos traslada a nosotros mediante pantallas psicodélicas y sonidos muy bien diseñados. La tensión de la historia se entremezcla con el excepcional diseño de escenarios, empujándonos hacia sustos y jumpscares. Aunque lo cierto es que se observa como en ocasiones la falta de narrativa y situaciones de verdadero terror se suplen con el susto fácil y los recursos de distorsión de pantalla. Los colores estridentes y escenarios diabólicos provocarán el agobio y claustrofobias buscadas por el desarrollador sin lugar a dudas, aunque serán los jugadores los que decidan si es algo de su agrado.

Por otro lado, los rompecabezas son en ocasiones extremadamente sencillos y en otras estúpidamente difíciles, rozando quizás el mal diseño. Aunque no se trata nunca de situaciones imposibles, sí es muy posible que la sensación sea muy frustrante. No colabora contra la frustración general los controles que, si bien claramente es a propósito, se sienten duros y de navegación rígida. Aunque es necesario para mantener la tensión, al final resulta desesperante no poder correr más rápido en un juego cuya mecánica principal se basa en andar, especialmente en una segunda partida.

Tres estaciones de destino

El diseño artístico del juego es, junto a su narrativa oculta, el punto más positivo en Subway Midnight. Buddy Darsktar ha desarrollado una suerte de Dante moderno que, de vagón en vagón nos sorprende y sobrecoge. Se trata de un despliegue artístico y técnico que no parece tal cosa en un principio, hasta que comprendes que su mezcla de tenebrosidad e inocencia es totalmente intencionada. Un diseño artístico que nos recuerda a los mangas de Junji Ito, mezclados con un pixelart desarrollado en Unreal Engine muy satisfactorio.

La narrativa, si bien compleja e inconexa, guarda sentido al final de la historia, especialmente si leemos las letras finales al terminar el juego. Subway Midnight está totalmente localizado al castellano, aunque eso no es decir mucho, apenas tendremos la oportunidad de leer una decena de palabras en toda nuestra aventura. Pero tres de ellas serán: “El Final Malo”, “El Final Bueno” o “El Final Mejor”. Exacto, este tren tiene tres estaciones de destino y nuestro amor por el detalle y mínima comprensión de la historia nos ayudará a desentrañar cada uno de ellos en los siguientes intentos que llevemos a cabo.

<vild>

En definitiva, un juego muy ambicioso en lo artístico y técnico, aunque se trata sin duda de una experiencia solo para avezados amantes de la novela visual. Si bien como novela gráfica o visual roza el sobresaliente, no nos vemos atrapados por una jugabilidad que se resume en un 90% en andar hacia adelante.

Además, en lo que se refiere al apartado técnico, el juego funciona aparentemente fluido en Nintendo Switch. Sin embargo, encontramos una pantalla de carga en cada paso a un nuevo vagón del tren. Algo que, en según qué fases del juego se produce de forma muy continuada y puede llegar a asquear.

Una joyita indie de la que disfrutar los días que tengamos ganas de dar un paseo en tren.

Please follow and like us:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

YouTube
YouTube
Instagram